BENEFICIOS PARA EL BENEFACTOR.-

Uno de los motivos por los que resulta recomendable hacer testamento, además de por proteger la situación económica del cónyuge mediante legado del tercio de mejora, es porque a través de él puede el testador realizar disposiciones de voluntad que de otro modo no podría hacer.

Un claro ejemplo de lo anterior es el establecimiento de condiciones que debe cumplir el llamado a heredar para beneficiarse de determinadas ventajas. Y tal vez la más extendida es la mejora en favor de un hijo o de un nieto siempre que haya cumplido con el cuidado del causante y de su cónyuge, en cuyo caso de verá beneficiado con un tercio de la herencia.

Pero esta cláusula testamentaria es peligrosa, ya que se realiza en un momento para surtir efectos en un futuro tal vez lejano, y con el paso de los años el llamado a cuidar del causante puede verse influenciado por elementos externos que influyan en su personalidad. Por tal razón en algunos paises, como por ejemplo Francia, esta cláusula testamentaria ha sido especialmente analizada e interpretada restrictivamente ante el aumento de asesinatos de personas de avanzada edad para acelerar el proceo de obtener la herencia.

Por eso resulta aconsejable utilizar esta medida cuando el natural devenir de los acontecimientos aonseja premiar a un pariente que ya viene manifestando espontáneamente esa dedicación que el causante quiere recompensar, pero no establecerla para buscar una atención que, de no mediar el premio no se daría de forma natural.

Y es que la atención a nuestos mayores ha de ser una decisión altruista y desinteresada, solo motivada por el cariño y no por la expectativa de un beneficio económico. Porque el cariño no se compra. Cosa distinta es que una vez manifestado ese cariño y dedicación su receptor quiera premiar la entrega con un gesto testamentario. Pero no al revés.